Los estudios deben realizarse en el interior de tu casa, ya que necesitamos de un ambiente oscuro para poder interpretar de manera correcta las imágenes en el ecógrafo. Si es un animal pequeño, en general, se puede utilizar una mesa situando nuestros equipos en un extremo y el paciente en otro. En casos de perros de raza gigante puede realizarse en el suelo. No es posible realizar el estudio sobre una cama, ya que al tener una base móvil resulta riesgoso el sostén de nuestros equipos.

Para los estudios cardiológicos, ecografías oculares y ecografías de cuello no se requiere ningún tipo de preparación previa, mientras que para las ecografías abdominales se necesita:

• Ayuno de sólidos de 8 horas.
• Agua puede tomar hasta último momento.
• Retención de orina, en lo posible de  al menos una hora antes de la ecografía.
• Dos personas para sostener al animal a menos que el paciente sea extremadamente dócil.
• Colocar un bozal en pacientes agresivos.

El método más preciso es el ecocardiograma, ya que por este medio se pueden obtener medidas precisas de las diferentes partes del corazón.

La ecografía es el método ideal para evaluar el corazón y el pulmón periférico en aquellos pacientes, que por diversas razones, no puedan ser desplazados ni cambiados de posición, ya que es de fácil acceso, inocuo y permite obtener una rápida adquisición de información sin necesidad de preparación previa del animal.

Sí, ya que  con el electrocardiograma podemos determinar la presencia de arritmias, mientras que el ecocardiograma  permite evaluar el tamaño del corazón, la función sistólica así como también la existencia de efusión pleural y pericárdica. De ninguna manera un estudio suplanta al otro, ya que brindan información diferente.

La clasificación ASA ( American Society of Anesthesiologists) es el método de evaluación que más utiliza el anestesiólogo previo a un procedimiento anestésico. Permite estimar el riesgo que plantea la anestesia para los distintos estados del paciente. En esta determinación se tienen en cuenta diversas comorbilidades que puedan ser una amenaza para la vida del animal  y que por lo tanto puedan incrementar el riesgo quirúrgico. Dentro de estas posibles afecciones sistémicas está el sistema cardiovascular, el cual es evaluado por el cardiólogo, quien emitirá un informe sobre el estado del mismo. Este informe le servirá al anestesiólogo,  junto con el resto de estudios prequirúrgicos,  para definir  el riesgo quirúrgico ASA. 

Si bien los gatos pueden padecer diversas afecciones cardiovasculares, las principales alteraciones a este nivel,  están asociadas a patologías en su músculo cardíaco, siendo el ecocardiograma una herramienta fundamental para poder diferenciarlas y clasificarlas.

Si bien todas las razas y perros mestizos pueden ser cardiópatas, hay una mayor predisposición de las Toy a sufrir enfermedades valvulares y de las gigantes a tener cardiomiopatías, o sea problemas en el músculo cardíaco. Dentro de los pequeños encontramos al  Caniche, Maltés, Chihuahua, Shih Tzu, Dachshund, Schnauzer y Cocker como principales afectados, mientras que de los grandes están el Boxer, Doberman, Ovejero Alemán, Labrador, Golden Retriever , Dogo de Burdeos y Pitbull.

Sí, hay patologías cardíacas en las que puede no escucharse soplo a la auscultación, sobre todo en sus estadios iniciales. Este es el caso de las insuficiencias aórtica o pulmonar, cardiomiopatía dilatada y cardiomiopatía restrictiva. Para su detección precoz es fundamental realizar una consulta cardiológica con ecocardiograma Bidimensional y en algunos casos Doppler.

La ecografía está indicada para evaluar el abdomen materno, la vitalidad de los fetos, edad gestacional y estimar una fecha probable de parto. No es precisa para determinar el número exacto de fetos, ya que por las características del estudio, es posible contar dos veces el mismo cachorro. Sólo puede afirmarse si la preñez es única o múltiple.

Si bien a partir de los 21 días de gestación ya es posible evidenciar vesículas gestacionales, las fórmulas de cálculo de edad gestacional son más exactas después de los 40 días, por lo tanto, para estimar una fecha probable de parto más precisa, lo ideal en casos que no sea de apuro saber, es esperar un mes y medio.